Hablar otros idiomas diferentes al materno, especialmente el inglés, es hoy día prácticamente un requisito indispensables para optar a una mayoría de puestos de trabajo, incluso aunque el propio país sea de habla no inglesa. Comunicarse en un lenguaje distinto al materno en el actual mercado laboral, altamente competitivo, es una ventaja que marca una diferenciación frente a otros candidatos.
Por ello es muy importante el aprendizaje del inglés hasta lograr un dominio equiparable con un nivel de bilingüismo, y no se trata por lo tanto de seguir cualquier cursillo o estudiar inglés con metodologías tradicionales, que terminan por cansar y provocan que un número determinado de alumnos se rindan y arrojen la toalla. Hay sobreoferta de opciones formativas de idiomas, algunas prometen espectaculares avances en pocos días, pero lo cierto es que para aprender bien una lengua extranjera y con una buena pronunciación hay que ponerse en manos de profesionales cualificados y se necesita una especial incentivación que logre enganchar a niños, jóvenes y personas de cualquier edad para que afronten con ganas y receptividad el aprendizaje de idiomas y éste resulte eficaz.
En dicho contexto, entre la oferta de enseñanza de inglés existente en el mercado destacan las que contemplan el inicio en el idioma desde edades tempranas, a partir de los 3 años, cuentan en sus plantillas con profesores nativos, lo que favorece una comunicación en inglés más natural, espontánea y fluida, o utilizan métodos modernos, además de convertir las clases en actividades divertidas y hasta emocionantes. Un ejemplo de ello es la Academia de Inglés Tomares, con capacidad y cualificación para formar en todos los niveles y a todos los grupos de edad, además de preparar a alumnos para la obtención de los certificados oficiales de la Universidad de Cambridge o el Trinity College London o para que mejoren sus resultados académicos.
Es lo que hoy día demanda nuestra sociedad: prácticas y metodologías pedagógicas modernas, respuestas educativas y formativas acordes con la realidad que presenta un mundo completamente globalizado, en vertiginosa evolución, inmerso en continuos cambios y, por tanto, muy exigente en su búsqueda de profesionales capaces de adaptarse a toda innovación, desde una preparación de máxima calidad, para hacerse cargo de iniciativas y proyectos cada vez más novedosos y tecnológicos. Y ya sabemos que el idioma que ‘habla’ la tecnología es el inglés.
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