En el pleno del Ayuntamiento de Las Rozas del mes de octubre, el concejal socialista Óscar Prados puso voz a las reclamaciones que, desde antes de las elecciones, los monitores deportivos de la empresa Sima Deporte y Ocio demandan al gobierno del PP.
Ante un gran número de estos monitores afectados, el Portavoz Adjunto del PSOE denunció cómo, de manera reiterada el Alcalde, José de la Uz, ha mentido a estos trabajadores: “A los trabajadores se les ha engañado, no se las ha reconocido la antigüedad y no se les ha compensado económicamente con la subida salarial, como el Sr. Concejal de Deportes del PP les prometió. En dicha reunión, incluso Ud. Sr Cabrera, les enseñó el cálculo en el que se detallaba que el aumento salarial suponía unos 270.000€ en cuatro años, y luego añadió que no habría problemas porque era poco dinero”.
Prados remarcó en su intervención, “un trabajador del capítulo 1 del Ayuntamiento cobra un 40% más de sueldo que un monitor deportivo [de empresa subcontratada] realizando las mismas funciones, teniendo las mismas responsabilidades y los mismos horarios. Y esto es una responsabilidad política, no técnica”.
No es la primera vez que los contratos que el Ayuntamiento realiza quedan en entredicho. En la legislatura pasada, ya tuvo que asumir parte de las nóminas de la anterior empresa tras declararse ésta en concurso de acreedores. La política de contratación del PP es evidente que no está funcionando y el fiasco en la adjudicación del contrato de basuras y el contrato de las trabajadoras de ayuda a domicilio son otra prueba más de ello… hechos éstos que también fueron denunciados por el Grupo Municipal Socialista. Trabajadores con sueldos precarios fruto de la externalización, con contratos baratos de las empresas licitadoras que ponen en riesgo el funcionamiento de los servicios de los vecinos de Las Rozas.
El concejal socialista, tras ser interrumpido varias veces por el Alcalde, formuló la siguiente pregunta: “¿Qué motivación tienen ustedes para no sentarse inmediatamente a firmar un acuerdo con los monitores deportivos del Ayuntamiento?”, que recibió los aplausos tanto de los monitores allí presentes como de parte de la oposición.
Ni el alcalde ni el concejal de Deportes contestaron. Sí lo hizo -con actitud bastante soberbia- la concejala de RRHH, dándoles como única respuesta: “tiene que ser con la empresa adjudicataria con quien tienen que hablar de su situación y de sus reclamaciones laborales”. Una vez más, el Equipo de Gobierno echa balones fuera y no se responsabiliza de sus errores. No se entiende entonces por qué el Equipo de Gobierno del PP les hizo promesas justo antes de las elecciones municipales. O sí se entiende: ¿Necesitaban sus votos? ¿Querían evitar escándalos en plena campaña electoral?
Los monitores deportivos abandonaron el pleno indignados por la ausencia de respuestas del Gobierno del PP, tanto por parte del concejal de Deportes como del alcalde. Mientras tanto, este grupo de trabajadores sigue sin encontrar solución a un problema que, tras la reunión que José Cabrera mantuvo con ellos poco antes de las elecciones, ya creían en vías de resolución. Una vez más, hicieron mal en fiarse.
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