La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha presidido ayer en la Real Casa de Correos el acto central de la campaña La unidad a ti debida, una iniciativa promovida por la Fundación Miguel Ángel Blanco para recordar el 25º aniversario del secuestro y asesinato del joven edil a manos de ETA. “Han pasado 25 años de la rebelión cívica y política que se produjo contra ETA y su entorno, de aquel espíritu el de Ermua. No encuentro un solo motivo para después de aquello traicionar a una nación o a su historia”, ha señalado.
“ETA tuvo que dejar de matar contra su voluntad, ¿Por qué premiarla después?”, se ha preguntado la presidenta durante el homenaje, donde ha estado expuesta la batería que el concejal tocaba desde pequeño y muy especialmente con su grupo, Póker. Ha estado todo este tiempo guardada en sus fundas en la lonja de la familia y por primera vez se muestra para recordar a su dueño. Posteriormente, será donada al futuro Memorial de las Víctimas que habrá en la Comunidad de Madrid.
“Ahora que el presidente del Gobierno diferencia España y País Vasco como dos países me gustaría saber a cuál pertenece a Miguel Ángel, si le mataron por ser un vasco incómodo o un español valiente, o un vasco valiente o un español incómodo. Es un sinsentido”, ha denunciado.
Los jóvenes tienen que saber
La sede del Gobierno regional ha albergado el acto de entrega de los premios A la convivencia, uno de ellos otorgado a la sociedad madrileña por acoger a los exiliados vascos que, durante décadas, huyeron del País Vasco y Navarra por el acoso y la intimidación del terrorismo, especialmente el de ETA. Díaz Ayuso ha sido la encargada de recoger este reconocimiento en nombre de todos los madrileños.
En este punto, la presidenta ha destacado que este gesto sirva para que, especialmente, “los jóvenes sepan que lo sucedido en el País Vasco les afecta directamente a ellos, que les puede ocurrir lo mismo y que nadie tiene derecho a truncar sus proyectos vitales ni imponerles nada bajo el terror”. “No hay derecho a borrarles su pasado para intentar robarles su futuro”, ha advertido.
Para la presidenta, todo lo que ha pasado en los peores momentos de ETA actuando “puede empezar de nuevo desde el momento en el que se aplauden los escraches, se boicotean conferencias en las universidades, se alimenta el linchamiento en la redes sociales, se amenaza impunemente al adversario político, se queman escaparates, cajeros y mobiliario urbano, se patea a policías, se señala al que va o deja de ir a una manifestación o se desprecia la ley, lo que peligrosamente cada vez más veces ocurre en España”.
Más reconocimientos a la convivencia
Por otro lado, el político Carlos Iturgaiz, ha recibido la misma distinción “por su resistencia ante la imposición totalitaria de ETA y sus cómplices, su defensa de las identidades no excluyentes, sino tolerantes e integradores, y su derecho a sentirse en libertad vasco y español sin complejos, una larga trayectoria en la defensa de los valores que también defendió Miguel Ángel”.
Por su parte, la historiadora Carmen Iglesias, directora de la Real Academia de la Historia, ha sido reconocida “por su trayectoria en defensa de la Constitución Española, garante de los derechos de ciudadanía de los españoles y del Estado democrático de derecho, valores y su apoyo al movimiento cívico constitucionalista”.
Otra distinción ha sido para la organización juvenil S`ha Acabat!, defensora de los derechos constitucionalistas en Cataluña. Según la Fundación, “toman el testigo de otros jóvenes que defendieron la libertad” como el concejal vasco asesinado hace un cuarto de siglo.
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