Para cualquier persona que desee empezar a utilizar los denominados ‘cigarrillos electrónicos’ o ‘e-cigarrillos’ puede resultar confuso adentrarse en el mundo del vapeo. Los términos que se manejan en este ámbito hacen referencia a mecanismos tecnológicos más o menos sofisticados, pero en esencia el objetivo de los diferentes dispositivos que hay en el mercado es el mismo.
Los vapes o vapers, cigarrillos electrónicos o vaporizadores, como se conoce indistintamente a estos aparatos, ya sean de un modelo u otro, se usan para inhalar vapor aromatizado -y exhalarlo a continuación-, en sustitución del tabaco, a través de un sistema electrónico que puede adquirirse en tiendas especializadas en vapes a mayoreo y que suelen disponer de los dispositivos más demandados.
Lo primero que ha de saber quien vaya a iniciarse en la utilización de e-cigarrillos es que debe tener cumplidos los 18 años. De hecho, no esta permitido vender estos productos a menores de edad. Y es que el cigarrillo electrónico es un sistema que se diseñó en un principio para simular el consumo de tabaco sin quemarlo directamente. Es decir, como sustitutivo del cigarrillo tradicional, estando compuesto el dispositivo de una resistencia y una batería para calentar y vaporizar soluciones líquidas para su aspiración o inhalación. Por este motivo, esta práctica se encuentra bajo las estipulaciones de la legislación que regula el consumo de tabaco.
Gran variedad de dispositivos y líquidos
Con el tiempo, el uso de vapes evolucionó más allá de esa práctica que les dio origen, siendo utilizados cada vez más sin que su uso esté vinculado necesariamente a haber sido previamente fumador de tabaco. Así, existe una gran variedad de líquidos para vapear, de modo que, además de los que sí tienen nicotina y que son los más propicios para ayudar a quienes lo deseen a dejar el tabaco, hay una multiplicidad de líquidos y de las mejores marcas que no tienen nicotina, pudiéndose elegir entre una gran variedad de sabores: desde los dulces hasta los afrutados e incluso los “tabaquiles”… y muchos más. Continuamente siguen apareciendo nuevos, que causan increíbles sensaciones en el paladar.
Por otra parte, hay dos tipos de dispositivos de vapeo: el ‘de boca a pulmón’ y el ‘directo a pulmón’. Su denominación tiene que ver con la manera en la que se inhala el vapor. En el primero éste se mantiene primeramente en la boca, siendo este sistema similar a como se fuma un cigarrillo tradicional, mientras que a través del segundo tipo de vape mencionado, se lleva a cabo una inhalación directa, similar por ejemplo a las de los inhaladores para el asma.
Asimismo, cada tipo de dispositivo para vapear ofrece diferentes opciones, como los de vaina o los de pluma en el caso de los ‘de boca a pulmón’. Éstos se conocen como dispositivos pod y suelen estar disponibles como kits de inicio, ya que son muy simples. Requieren tan solo la inserción de un cartucho o especie de cápsula para proceder después a la inhalación como si se tratara de un cigarrillo. Y ello sin necesidad de presionar botones o cambiar bobinas.
Dejarse asesorar y consultar con los especialistas
Quizá entre las mejores opciones para principiantes se encuentren los vapes desechables, con los que basta con dar directamente caladas a sus boquillas. Están diseñados para activarse con ellas, por lo que no hacen falta botones ni baterías de recambio. Una vez utilizados, sencillamente se desechan.
Una vez iniciados en el vapeo se puede ir avanzando poco a poco y progresivamente en el inmenso mundo de los vapes, ya que existen muchos productos de cigarrillos electrónicos, algunos con tecnologías más complejas y muy avanzados, que pueden llegar a ofrecer más sabor y una mayor producción de vapor. Pero antes de llegar a éstos es conveniente ir paso a paso y dejarse asesorar por especialistas de confianza en la venta de vapes, como los de Vapemate.
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