Tras meses de parón en el servicio provocado por la pandemia y el riesgo potencial de contagio por SARS COV-2, la concejala de Servicios Sociales anunciaba en una comisión informativa la decisión de no volver a licitar el servicio, “abandonando a los usuarios que disfrutaban del mismo”, explican fuentes del PSOE Majadahonda.
La noticia afectará negativamente “a muchos mayores de Majadahonda que bastante han sufrido ya durante la Pandemia como para que les quiten un servicio que les permitía socializarse y ser acompañados a la realización de diferentes actividades en dependencias municipales. Ahora, debido a sus problemas de movilidad ya no podrán hacerlo gracias a una decisión incomprensible que ahonda aún más la brecha social en Majadahonda”, ha señalado el portavoz socialista, Manuel Fort.
El Ayuntamiento ha decidido paralizar el contrato en mitad de la pandemia y justo antes de su adjudicación definitiva “alegando motivos de interés público”. Este hecho provocó que la empresa adjudicataria recurriera ante el Tribunal de Contratación de Madrid resolviendo éste favorablemente el recurso, y que el Ayuntamiento anunciase que volvería a sacar la licitación cuando las circunstancias sanitarias así lo permitiesen.
“Lo que han hecho ha sido precisamente todo lo contrario, aprovechar la tesitura para eliminar el servicio por completo sin avisar a nadie abandonando a nuestros mayores y discapacitados”, ha denunciado Fort, quien también ha añadido “que estos y otros recortes sociales en los nuevos presupuestos sean los más injustos e insolidarios que recuerdo, y nos sitúan en una deriva de desmantelamiento de los servicios públicos y de abandono a quienes más lo necesitan. Un hecho lamentable en una ciudad como Majadahonda con un renta per cápita muy elevada y un superávit de más de 70 millones de euros”.
Para finalizar, Fort ha subrayado que “cuando más falta hace, nos encontramos con un equipo de Gobierno que dilapida los ahorros de los vecinos en inversiones, muchas no prioritarias, sin consultar a nadie, no construye vivienda pública y además elimina ayudas a los más necesitados como las becas de comedor o la partida de cooperación”.
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