El pasado sábado 16 de diciembre, la Plaza Mayor de Colmenar de Oreja fue testigo de un evento histórico: la 45ª Representación del Belén Viviente, una tradición que ha perdurado a lo largo de las décadas y que este año celebró su aniversario de manera extraordinaria.
Desde las 19:00h, la Plaza Mayor se transformó en un escenario mágico que transportó a los asistentes al corazón de la historia del nacimiento de Jesús de Nazaret. Este evento, más que una simple representación, es una experiencia que ha unido a generaciones enteras, convirtiéndose en una parte integral de la celebración navideña en Colmenar de Oreja.
La arquitectura castellana de la Plaza Mayor proporcionó el telón de fondo perfecto para el Belén Viviente, llenando el lugar con luces cálidas, música navideña y la presencia de personajes icónicos de la historia. María, José y el niño Jesús en el pesebre cobraron vida, cautivando a una audiencia que abarrotaba el espacio.
Este año, el Belén Viviente de Colmenar de Oreja no solo celebró su 45º aniversario, sino que también dejó una marca indeleble al atraer a una multitud récord. La Plaza Mayor estaba rebosante de espectadores ávidos de sumergirse en la autenticidad de la Navidad y revivir la historia de una manera única.
Un evento para toda la familia
La Representación del Belén Viviente es una experiencia para todas las edades. Desde los más pequeños fascinados por la magia del momento hasta los adultos que buscan reconectar con el verdadero significado de la Navidad, este evento ha demostrado ser un lazo que une a la comunidad en torno a la celebración de la temporada más especial del año.
Colmenar de Oreja agradece a través de un comunicado a todos los participantes, voluntarios y espectadores que han hecho posible este evento memorable. “Seguiremos ofreciendo experiencias únicas y eventos culturales, continuando con el compromiso de compartir la riqueza de nuestra historia y tradiciones con locales y visitantes por igual”, señalan desde el Consistorio.
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