Si te estás planteando solicitar un crédito por una necesidad financiera particular y no tienes claro cuál elegir entre las diferentes opciones crediticias existentes en el mercado, no lo dudes: el crédito personal es probablemente el que mejor se adapta a lo que estás buscando.
Entre las ventajas de este tipo de créditos en Madrid cabe destacar la posibilidad de beneficiarte de competitivas tasas de interés, completamente adaptadas a tus necesidades reales de financiación. Además, su aprobación es rápida a través de un proceso sencillo, transparente, ágil y con atención personalizada, en el que podrás seleccionar, con flexibilidad, el plan de pagos que más te convenga en función de tu situación económica.
Gestión responsable para fortalecer el historial crediticio
Para la concesión de un crédito personal no suele ser un impedimento el que no dispongas de un historial crediticio, lo cual es otro incentivo a tener en cuenta. Y si, una vez obtengas el crédito, vas cumpliendo con los plazos de pago que tú mismo/a has determinado previamente, podrás ir haciéndote precisamente con un buen historial crediticio. Y por el contrario, si no llevas a cabo una gestión responsable del crédito e incumples en los pagos o te atrasas al respecto, tu perfil crediticio podría llegar a tener un impacto negativo.
Por otra parte, y como otro aspecto muy positivo a valorar, una vez sea aprobada la operación, recibirás rápidamente en tu cuenta el dinero solicitado. Con otra ventaja: el importe a recibir es personalizable, es decir, puedes elegir exactamente la cantidad de dinero que precises, por lo que no te quedarás corto cuando podrías necesitar un importe mayor ni tendrás que solicitar más de lo que necesites, con el consiguiente incremento en tu esfuerzo financiero que ello supondría, tal y como ocurre con ofertas crediticias cerradas, como las que abundan en el mercado.
Qué es un crédito personal y para qué se utiliza
Como su propio nombre indica, un crédito personal es un préstamo económico que realiza una entidad financiera a una persona que lo requiere para una finalidad personal: afrontar una atención médica urgente sobrevenida, efectuar reformas en el hogar, comprar un automóvil o financiar la formación y/o educación de un hijo, por poner algunos ejemplos.
Los principales requisitos que hay que reunir para que el crédito a solicitar sea concedido son: disponer de ingresos regulares estables y tener un historial crediticio solvente, siendo muy valorable también la antigüedad en el puesto de trabajo que se desempeñe. Y en este sentido, sobre todo, no haber figurado en un registro de morosidad, aunque ello también podría llegar a ser una circunstancia salvable, según las características y el perfil del solicitante, por un lado, y la entidad crediticia que vaya a otorgar el préstamo, por otro.
Atención a los gastos adicionales por gestión del crédito
Las tasas de interés a aplicar a un crédito personal puede oscilar de acuerdo con las condiciones existentes en el mercado en el momento de la solicitud y el propio perfil del peticionario, que debe tener en cuenta, de cara a acertar con el importe económico a solicitar, que la tramitación y gestión del préstamo podría conllevar gastos adicionales, como una comisión de apertura o penalizaciones económicas por amortizaciones anticipadas de importes o cuotas, entre otros costes administrativos. De todo ello debe informarse el solicitante, y asesorarse bien, antes de iniciar el proceso de solicitud.
Asimismo, han de negociarse entre el solicitante y la entidad financiera los plazos para devolver el crédito, los cuales pueden oscilar entre varios meses y un buen puñado de años, dependiendo ello del importe a devolver y las condiciones que se pacten con la citada entidad.
Los pagos suelen acordarse con carácter mensual y cada pago comprende una parte del capital más los intereses correspondientes en función de la tasa de interés aplicada.
Solicitud online en un proceso guiado sin moverse de casa
En la actualidad, los créditos personales se solicitan fundamentalmente online a través de plataformas habilitadas al efecto por las entidades financieras en procesos en los que se va guiando al solicitante en cada paso y cumplimentación a efectuar. Normalmente los documentos que han de aportarse son el acreditativo de la identidad del solicitante (DNI, NIA, pasaporte…) e, igualmente, los acreditativos de los ingresos económicos regulares de los que se dispone (nóminas, contratos de alquiler, certificados bancarios, etc.).
Ahora también es posible solicitar líneas de crédito de Plazo de hasta 2.000 euros con cashback. Basta para ello con escanear un código QR para descargarse la correspondiente aplicación (App). El mismo se ubica en la web de la entidad financiera, dando acceso tras el escaneo a un proceso que comienza con la creación, a través de la misma, de una cuenta en un proceso guiado, totalmente gratuito, a través del que se interactúa con la entidad de manera rápida, con facilidad y sin moverse de casa. Es una estupenda alternativa a los créditos personales tradicionales para disponer de créditos rápidos por importes o cuantías pequeñas pero que ayudan a resolver rápida y facilísimamente apuros financieros.
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