Me pregunto que sucedería si empezásemos a preguntarle a los programas, llamados de Inteligencia Artificial, sobre mil cuestiones… ¿Qué nos dirían, qué nos darían…?
Me digo a mi mismo, pregunten a uno de esos sistemas, existen varios, y, por tanto, supongo, que con distinta profundidad y esencialidad y desarrollo y profundidad: ¿Cuántos artículos periodísticos existen sobre los derechos de la mujer en Internet…? ¿Primero, que digan el número o la cantidad, después, si desean y es posible, y, tienen capacidad, que indexen o cataloguen, que muestren nombres de autores y de títulos y de publicaciones…? ¿Después, quizás, que copien una parte de ellos…?
Se imaginan la aplicación de cuántas consecuencias, cuántos cambios culturales, podrían producir. Ciertamente, debo confesar, siguiendo al viejo maestro Aristóteles, que toda técnica o tecnología, es de doble uso. No puedo cambiar esta situación. Un hierro afilado que corta, puede convertirse en espada, lanza, o cuchillo para degustar quesos griegos…
Lamento decir e indicar, que la IA podría y podrá ser utilizada con esa doble finalidad. Según, según en las manos y cerebro y corazón que caiga. Puede ser utilizada para el bien y, esperemos una inmensidad de bienes, y, quizás, también para una enorme cantidad de males. Estoy hablando en el terreno teórico y conceptual –aquí, ahora, no entramos en eso de la reducción de los trabajos de los hombres, de la reducción del empleo, ni tampoco en la problemática, si la IA se podrá independizar de los seres humanos, ni tampoco, de las tres fases posibles, de estos procesos, estamos en la IA, en la primera, el temor de cuándo se llegue dentro de unas décadas a la segunda o tercera…-.
Solo hablamos ahora, de cuántas preguntas se le podrían hacer: ¿Por ejemplo, que nos digan que nuevos deportes, están pautados y normativizados, inventados y creados que existen y que están sus textos o imágenes en Internet…? ¿Quizás, nos podrían indicar, que muchos sujetos, han inventado docenas de nuevos deportes, o, quizás, cientos, variedades o combinaciones u originales, que podrían servirnos para la sociedad? ¿O, juegos tradicionales de otras culturas y sociedades, que con reglas fijadas e internacionalizadas, podrían servir para nuevos deportes, y, se necesitan estos para que los seres humanos realicen cosas buenas…?
¿Si preguntamos soluciones al problema del hambre, o de la vivienda, o del mismo trabajo, o mil cosas más, quizás la IA, nos podría aportar soluciones, quizás, alguien que vive y existe en Alaska, en un pueblo de mil habitantes, se le ha ocurrido una solución a alguno de estos problemas, que no es total, pero que puede servir, de mucha ayuda…? ¿Existen millones de kilos de cerebro humano en el planeta, al menos, ocho mil millones de kilos de cerebro, porque somos ocho mil millones de seres humanos, muchos pueden crear y criar e imaginar e inventar cosas buenas y cosas positivas, para la humanidad…? ¿Cosas que duermen en las bodegas de los vientres de Internet…?
Cualquier persona que empiece una tesis doctoral, un TFG, y, no solo pequeños trabajos de secundaria, puede preguntar a Internet sobre su temática, y, quizás, ya de antemano se encontraría con cientos de soluciones, cientos de documentos y de información, que ni siquiera sabía que existían… De cientos de relaciones e interrelaciones… Después, tendría que acotar, matizar, perfilar o concretizar… su tesis doctoral o trabajo de investigación…
Imaginen, que pregunten cuántos poetas hay o han existido en su provincia o en su localidad, a lo largo de décadas. Cómo no todos los que han estado tendrán presencia en Internet, pues muchos quedarán fuera, pero quizás, se dará cuenta, que han existido decenas, que no conocía o apenas conoce. Pero Internet y la IA, le proporciona datos. Pues lo mismo aplicado a los fotógrafos, matemáticos, físicos teóricos, novelistas, pintores, diseñadores, etc.
Solo espero que la moralidad individual y colectiva sea la correcta, no se utilice la IA, para buscar cosas que sirvan para el mal y la maldad y lo malo. Sea en una temática o sea en otra. Pero esto supera mis posibilidades de evitarlo. Por eso es tan necesario, una ética mínima universal, como algunos pensadores y filósofos y teólogos, proclaman desde hace décadas. Por eso, es tan importante, no olvidar la ética y moral tradicional que hemos tenido durante siglos, que se perfile y se matice, en lo que tenga que serlo, porque ha sido la base de Occidente, y, la que nos ha hecho llegar a los Derechos Humanos y a otras temáticas. Y, para eso, también necesitamos legislaciones teóricas y prácticas, eficientes, verídicas, bondadosas, eficientes, que eviten el mal y la maldad, y, aumente el bien y la bondad…
¡Creo que unir Internet y la IA producirá una estallido en el conocimiento humano, porque por una vez, incluso en la primera fase de la IA, se podrá recoger, todo, todo lo que se ha inventado o creado o diseñado, sea erróneo o verdadero, sobre cualquier tema, por primera vez, en la historia, algo que haya escrito un pensador o escritor que esté metido en una aldea de Sri Lanka, pueda ser visto por otros, en la egregia Oxford o Cambridge, sea de matemáticas o de física o de poemas o de soluciones a cualquier tema…! ¡También, es cierto, que un cuchillo mal utilizado, puede servir para el mal, y, bien utilizado para cortar jamón o curar con un bisturí una enfermedad…!
¡Por una vez, esperamos y deseamos que una buena solución, que se le ha ocurrido por y a alguien, sin estudios o con estudios, que está dormida en Internet, puede ser vista, recogida, por otro alguien, para resolver un problema o cuestión, grande o pequeña…! ¡Gutenberg, y su revolución, será y serán pequeña, a lo que sucede y sucederá con Internet y la IA, quizás, de todo ello, surja, dentro de unos siglos, no solo una nueva etapa histórica, sino un nuevo hombre, Hombre, una nueva especie…!
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