La Sala de Exposiciones de Mataelpino reúne a tres consolidadas pintoras

Mercedes Herrero

Dos de las obras de esta exposición

Por Armando Sáez

La Consejería de Cultura de Mataelpino sigue apostando por el arte, y en esta ocasión ha reunido a tres pintoras contemporáneas con técnicas distintas y una férrea dedicación en sus trabajos. No son nuevas promesas, son mujeres artistas que, desde edad muy temprana y con los años, han depurado sus técnicas y su ilusión por el arte y la pintura. La exposición comenzará el 19 de junio y estará hasta el día 30. Se inaugurará el día 21 de junio a las 19:00 horas.

La madurez es una buena consejera y presentación de obras desarrolladas por manos expertas y espíritus eternamente jóvenes. Con la edad se aprende a valorar cuando cambias de dimensión y procedes a la creatividad impulsiva. Y no hablamos de las dimensiones largo, ancho y profundo con un componente extra de tiempo, sino con valores mucho más profundos y elevados, como física, emocional, espiritual y mental y si a esto le añadimos el componente de creatividad, trasladamos al artista a un nivel superior y mucho más elevado, que estas tres mujeres pintoras controlan y alcanzan con una visible facilidad.

Blanca Lasheras, 1.944. Sus obras reflejan sus ganas de seguir evolucionando, utiliza colores vibrantes y técnicas variadas, contrastes de color sobre fondos oscuros, dominio del dibujo y temas complejos que suponen un reto, pues está dispuesta a ir a por todas sin imposición de límites, dando rienda suelta a su aptitud y tesón, lo cual se pone de manifiesto contemplando sus cuadros.

Pilar Rodríguez, 1.951. Alumna de Miguel Ángel Oyarbide, que traía al estudio a Antonio López, su amigo, a dar clases magistrales, una época fantástica. “En esa época aparecen los móviles con más tecnología, con una aplicación para poder escribir en hojas cuadriculadas. En vez de escribir me entretenía en hacer rayas con el dedo, curvas, redondeles, alguna cara con ojos y pelo, arboles, algún bodegón, paisajes, que luego rellenaba de colores, les hacía fondos, me costaba mucho, pero iban saliendo cosas dibujadas con el dedo”, explica. En 2023 decide no están mal y las lleva a gran formato y las serigrafías en 60 x 90 cm quedan muy vistosas.

Mercedes Herrero, 1.948. En 1970 se le presenta la oportunidad de asistir a las clases que impartía el gran pintor paisajista Manuel Aragón (San Fernando, Cádiz 1932 – Collado Villalba 2006), momento en el que, sin ella saberlo todavía, cambiaría su vida, así como su obra con el devenir del tiempo. Asiste a las clases del Círculo de Bellas Artes de Madrid en los años 1985-1987. Veinte años después de su primer contacto con Manuel Aragón en las clases de pintura, coinciden de nuevo dando paso a la que será una relación personal y artística como esposo y maestro que se prolongará hasta la muerte del pintor.

Encontramos la obra de Mercedes muy lejos de aquellos incipientes temas y forma de plasmarlos, dejando ver clara y manifiestamente la influencia de Aragón tanto en la temática, fundamentalmente paisajes, como en la forma de pintar, utilizando el óleo sobre lienzo en la mayoría de sus cuadros.

Básicamente nos encontramos con tres pintoras de gran calado que han decidido unirse para presentar una obra diversa en técnicas y llamativa. Una exposición que ningún aficionado debe perderse.



Be the first to comment

Leave a Reply

Tu dirección de correo no será publicada.


*