“El pueblo de Majadahonda debe reconocer y recordar las figuras de Marcelino Camacho y Josefina Samper poniéndole su nombre a una calle, plaza o parque público de Majadahonda, puesto que además de ser protagonistas de la Historia reciente de España y de la lucha por la democracia y los derechos sociales de los trabajadores, fueron ilustres majariegos en el último tramo de sus vidas”, ha apuntado Juancho Santana, portavoz de Izquierda Unida en el Ayuntamiento de Majadahonda.
“Por ejemplo, podría ponerse su nombre al parque Torrelodones, entre la calle María Teresa León y la carretera de Pozuelo. Además, IU considera que el Ayuntamiento debe realizar un acto conmemorativo, con una exposición sobre sus vidas y obras, para que los escolares y los vecinos y vecinas de Majadahonda conozcan sus trayectorias y su incansable lucha por la democracia y los derechos sociales y laborales de la clase trabajadora”, sugiere Santana.
El 21 de enero de 2018 se cumplieron cien años del nacimiento de Marcelino Camacho, fallecido en Majadahonda el 29 de octubre de 2010. El pasado 13 de febrero de 2018 falleció, también en Majadahonda, Josefina Samper, su compañera de toda la vida.
Marcelino Camacho fue fundador y primer Secretario General de CCOO (1976-1987), y diputado del PCE por Madrid (1977-1981). Marcelino Camacho contribuyó de manera especial a hacer de CCOO un modelo de compromiso con la lucha antifranquista, y a que haya seguido luchando por las libertades, la paz y los derechos de los trabajadores y trabajadoras.
Ha sido, sin duda, uno de los grandes protagonistas de la Historia de España, que ha jugado un papel clave tanto en la lucha contra la dictadura franquista, como en la transición y en democracia. Marcelino recibió numerosas muestras de reconocimiento, como la Medalla al Mérito Constitucional concedida a «aquellas personas que hayan realizado actividades relevantes al servicio de la Constitución y de los valores y principios en ella establecidos»; la medalla de oro al mérito en el trabajo y la medalla al mérito civil.
Josefina Samper se inició en la lucha política siendo una niña en Orán, Argelia, ayudando a los republicanos refugiados que huían de la represión franquista. Josefina fue una de las fundadoras, en 1965, del Movimiento Democrático de Mujeres, germen del movimiento feminista actual. Cuando la represión golpeó severamente a su compañero Marcelino, ella y otras mujeres de presos desarrollaron una potente actividad, dentro y fuera de España, para conseguir mejoras en las condiciones de vida en las cárceles y para reclamar la amnistía para los presos políticos.
Ambos gozaron y siguen gozando del máximo reconocimiento en nuestro país por su trayectoria en defensa de la democracia y los derechos sociales.
El nombre de Marcelino y Josefina siempre estará asociado al popular barrio madrileño de Carabanchel, donde residieron casi 50 años y en el que recientemente se ha puesto su nombre a una avenida, y donde está previsto poner una placa conmemorativa en la que fue su vivienda, con el acuerdo unánime de todos los grupos políticos del Ayuntamiento de Madrid.
Pero también ambos están muy ligados a Majadahonda ya que, además de que su familia es vecina desde hace décadas, en 2009 Marcelino y Josefina se trasladaron al municipio, a la urbanización Las Viñas, para vivir junto a sus familiares más directos. Ese mismo año se celebró en la Casa de la Cultura un emotivo y multitudinario acto de bienvenida y homenaje organizado por IU y CCOO y en el que Marcelino Camacho haría la que sería su última intervención pública.
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