Sobre el nuevo rey inglés

El rey Carlos III, cuando aún era el príncipe de Gales, en 2019 / Foto: Wikipedia

Miles, decenas de miles de crónicas, críticas, análisis, comentarios, artículos se llenarán estos días, antes y después, de este acontecimiento…

Por lo general, no redacto, apenas artículos sobre personas políticas concretas, ni sobre situaciones sociopolíticas, pero hoy, si quisiera hablar algo sobre este tema –cosa que todavía no he decidido, si después publicaré…-. No entro en juzgar a la persona que encarna ese nuevo cargo y nueva carga, porque todo el mundo tiene grises y blancuras y negruras. Cierto que dirán, que unas personas más que otras.

Pero la realidad, que ante este acontecimiento y realidad, como casi en todo hay tres posturas, unos que lo niegan y lo consideran negativo, otros, que lo afirman como positivo, y, otro grupo, que están en medio, también indiferentes. En todos los grupos existen matices y gradaciones…

Recuerdo hace lustros ya, cuando en un bar, el dueño siempre criticaba a un determinado rey –que no pondré el nombre-, y, siempre quería, cuando iba a tomar café y hacer tiempo y esperar y leer el periódico en medio. Siempre me invitaba a que yo también le criticase. Y, nunca lo hacía. Pero ya una vez, después de tanto insistir una vez y otra, un día y otro le dije… “Usted sería capaz de soportar que hoy, podrían hacerle un atentado…”, “usted soportaría haber tenido una veintena de intentos de atentados”, “usted no tendría libertad propia, porque siempre tiene que llevar escoltas, con lo cual, siempre alguien sabe dónde está, y toda esa información puede ser utilizada en su contra alguna vez…”. Y, continúe con varios usted y usted y usted…

Al final, la persona se sonrojó. Y, dijo, “bueno, bueno si es así, quizás sea mejor ser dueño de un pequeño bar como el que tengo, que no ser rey…”.

Esta es la cuestión profunda y esencial. No digo que todo sea negativo en ser rey o reina. Pero no cabe duda, de que existen muchos elementos negativos. Desde que nacen, antes del engendramiento, en la barriga de la madre –etapa epigenética, por si alguien piensa que no sé utilizar tecnicismos…-. Desde esos momentos, ya antes de nacer, tienen obligaciones, deberes, normas, formas de actuar, de hablar, de pensar, de sentir… Se le condiciona todo y en todo. No digo que todo sea negativo. Pero pocas personas soportarían todo ese juego, si no se le entrenase desde jóvenes…

Además, como personas, también tienen sus heridas. No me gusta narrar nada en concreto, pero el nuevo rey inglés, se dice desde hace lustros o décadas: “que sintió el alejamiento de la madre, porque la reina tenía que atender todas sus obligaciones de reina”. Ese sentir y sentirse abandono/abandonado. Puede ser, lo que explique muchas de sus conductas. No decimos, que eso sea, un cheque en blanco para justificar todo, pero si para explicar. Porque cada ser humano lleva en su corazón sus alegrías y sus traumas negativos. Y, todos tenemos que luchar contra nuestros dolores profundos, nuestras heridas profundas, nuestros traumas profundos. Y, todos de ese estercolero de dolor, como los árboles tenemos que transformarlos en sabía para que crezcan ramas, flores, frutos buenos y positivos y con colores… Es la ley de la vida…

Usted soportaría tener todos los días contados, todas las horas, todos los minutos. Siempre recibiendo normas y conductas y límites, siempre tratando y hablando con unos y con otros. Siempre. Salvo algunas horas cada día, algunos días cada año. Y, estos también de alguna manera reglamentados… ¡¿Usted lo soportaría…!?

Usted soportaría que le hayan hecho millones de fotos, cualquier gesto, es analizado o ponderado o guardado o conservado para utilizarlo cuándo convenga… usted soportaría que de usted pueden hablar, me refiero, en monarquías parlamentarias y constitucionales occidentales, todo lo que quieran decir de usted, pero usted, por responsabilidad, por justificación al Estado, por defensa de su Estado, tiene que callarse… Usted, tiene que soportar que un colectivo equis, le diga que ha hecho tal cosa. Y, usted tiene que callar, que personas de ese colectivo que le achacan a usted, tal cosa, “ellos han hecho diez veces la misma cosa…”. Pero usted como rey o reina tiene que callar…

Sin ser especialmente monárquicos, sin ser especialmente republicanos, es obvio y evidente, si analizas una realidad, desde la antropología, -emic y etic-, intentando ser lo más ponderado posible. Nadie niega que una monarquía parlamentaria de partidos y con constitución occidental, permite estabilidad y orden. Y, el orden y la estabilidad es hoy la base de la riqueza, riqueza en todos los sentidos. Y, por tanto, que el pueblo, si el pueblo, usted y yo, podamos seguir comiendo patatas/garbanzos/gambones, tengamos un pequeño coche, unas pequeñas vacaciones, cuándo las tenemos, tener cierta esperanza de futuro…

¡Porque no olvide usted una cosa, los que están en contra de un sistema establecido, sea equis o zeta, si es además constitucional, es más delito/crítica, los que van en contra de un sistema equis, después, si se complica y cae en el desgobierno un nuevo sistema, esos se marchan y, usted y su vecino se quedan aquí…!

¡Hubo un tiempo, no sé si usted lo sabe, que en una nación-Estado-sociedad, siete grandes prohombres, firmaron un escrito y manifiesto para que la Monarquía desapareciese, efectivamente, así lo hizo al cabo de unos meses… cuándo llegó esa República, después, cayó en el desorden. Pues de esos siete grandes firmas, cinco de ellos y sus familias, se marcharon y en ese país de fábula y de invento, el resto, el pueblo, que ni quería que se marchase la monarquía, ni estaba en contra de la república, tuvieron que soportar el desorden, una guerra, una postguerra, y, todo lo demás…! (¡Es un cuento, que usted tiene que descubrir si es solo una fábula o es verdad…! ¿…?).

Yo, pienso que hoy alguien que tenga un oficio liberal –que no es mi caso, ni lo ha sido-, y que disponga de un capital de dos o tres millones de euros –que no es mi caso, ni lo ha sido-, hoy, vive mejor que cualquier rey/reina, porque tiene muchas ventajas de la vida, y, no dispone de tantas desventajas y obligaciones que un rey, y, si es reina, aún más, que debe soportar durante toda su vida, desde su engendramiento… ¡Muchos años al nuevo rey inglés, por el bien de su reino y por el bien de Europa y por el bien de España…!


Jesús Millán Muñoz – http://youtube.com/jmmcaminero  © jmm caminero (07-10 mayo 2023 cr).



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